Ispansi Portada

 

Título Original Ispansi (Españoles)

Año 2011

Duración 115 min.

País  España

Director Carlos Iglesias

Guión Carlos Iglesias

Música Mario de Benito

Fotografía Tote Trenas

Reparto Esther Regina, Carlos Iglesias, Isabelle Stoffel, Eloisa Vargas, Bruto Pomeroy, Isabel Blanco

Productora Maestranza Films / Saga-Productions

Valoración 3

 

 

Hace cinco años, Carlos Iglesias, un actor que, por aquel entonces, se había convertido, gracias a puntuales y distintas apariciones televisivas en programas de muy distinta índole, debutó como director de largometrajes con un dignísimo ejercicio. Su título,  Un Franco Catorce Pesetas. Se trataba de una sentida aproximación a esa crucial tesitura histórica que aconteció en nuestro país, durante la década de los años sesenta, cuando un vasto número de hombres y mujeres, en busca de un sustento mejor que el que aquí podían granjearse, cruzaron la frontera al llamado de una  Europa que reclamaba mano de obra urgente. Un Franco Catorce Pesetas abordaba, desde un palmario posicionamiento amable, esa desesperada decisión radical que es abandonar la geografía propia, obligado por una apremiante circunstancia vital: la emigración a tierra extraña, lejana, otra.

ispansi_1

La película dejaba entrever las posibilidades de un realizador que, gracias a una evidente implicación casi biográfica, lograba imponer un cierto orden final a un producto que, en su media hora inicial, hacía prever lo peor. Las primeras escenas producían la decepcionante sensación de hallarnos frente a una notoria incapacidad escénica, pues las imágenes no conseguían escapar a un encorsetamiento formal de raquíticas y  agarrotadas dimensiones. El planteamiento de la penosa carestía  cotidiana en la que se inscribían los protagonistas no lograba superar una grimosa adscripción al topicazo de melodramón tramposo. Finalmente, la mediación de un incisivo humorismo narrativo, que aparecía una vez los personajes principales llegan a Suiza, lograba aligerar, hacer fluir con cierta pericia descriptiva el resto de los acontecimientos relatados.

Por desgracia, esto último no ocurre en Ispansi, su nueva obra. En esta sí se produce la delusoria concreción del hundimiento. Su segundo largometraje incide extensivamente en los lastres que en la anterior quedaban suturados con loable pertinencia. Un Franco Catorce Pesetas sabía solucionar, poco a poco, hilvanando una modestia descriptiva,  un sencillo costumbrismo bien sostenido, que permitía al espectador identificarse, reconocerse, asimilar con prontitud y cercanía la drástica extenuación extranjera a la que debían hacer frente los humildes personajes. Ispansi, no lo consigue jamás. Iglesias no ha sabido calibrar la monumental dificultad de un proyecto que hubiera requerido la solidez de un narrador muchísimo más bregado en este tipo de proporciones históricas, nada diminutas.

Ispansi_2

Verdaderamente, no resulta nada fácil pormenorizar el compendio de desatinos cometidos en una obra que parte de una intención tan noble como la que aquí sirve de causa original de la empresa. Iglesias vuelve a incidir en narrar una nueva odisea emigrante: la que tuvieron que llevar a cabo un numeroso grupo de valientes mujeres y hombres, a cuyo cargo quedaron los más de dos mil niños trasladados a Rusia, por parte del bando republicano, durante los días infaustos de la Guerra Civil española. Se trataba de niños huérfanos, que vivían en hospicios, y se les embarcó en este crudo trayecto con la intención de salvaguardarlos de los riesgos de un destino onerosamente precario. Ispansi, es el loable intento de dar noticia sobre este hecho brutal. Resulta del todo necesario dar voz retrospectiva a quienes huyeron a un confín, que, lejos de convertirse en cobijo salvador, acabó constituyéndose en inclemente y tortuosa trampa fatal.

El principal obstáculo que  pronto se erige en categoría de insalvable reticencia es la considerable y peliaguda dimensión del hecho histórico narrado. En todos los sentidos. Tanto a nivel de producción, como en el sustrato escrito que la abastece de entramado argumental. En cuanto a la suma de efectivos convocada para la facturación del proyecto, a pesar de que en algunos momentos Iglesias sabe aprovecharla al máximo, cabe decir que, muy rápidamente, queda evidenciada su perniciosa escasez. La obligada reconstrucción física de unos hechos acaecidos en un tiempo y en un espacio muy alejados al nuestro necesita de una potencialidad de presupuesto que nuestra cinematografía, en general (a excepción de Amenábar, Almodóvar , De la Iglesia y pocos más) no posee. Ispansi,, sobre todo, en las contadas escenas de acción, adolece de esa precariedad.

Ispansi_3

Sin embargo, en donde Carlos Iglesias naufraga por completo es en la pobrísima escritura de un guión atropelladamente trufado de personajes, acaecimientos, percances, vaivenes existenciales y planísimos saltos en el tiempo. Ispansi, adolece más de acartonamiento interno que de falta de presupuesto económico. Tal lacra no hay inyección monetaria que la pueda suplir. El film está hecho avanzar a fuerza de obviedades dramáticas propias de rancio folletín evocador. La voz en off narradora de muchos sucesos intenta aportar unas informaciones que las imágenes nunca prestan ni escenifican. Los personajes no saben escapar al tópico, al lugar paralizantemente común desde el que están concebidos. De resultas, la globalidad del producto deviene atrofiada, indecisa y dramáticamente inhábil.

ispansi_4

Ispansi, es uno de esos ejemplos en los que la intención de partida supera con creces los resultados finales logrados por quien se ha autoimpuesto hacerla realidad en la pantalla grande. La película no hace justicia alguna al motivo que la da lugar. El segundo film de Carlos Iglesias decepciona porque no sabe hacer exclamar la verdad persigue. Es un film estrellado contra la desmesurada ambición que lo fragua. Contra ese mal calculado apetito,  y, fundamentalmente, contra la vacua verosimilitud interna que lo atrofia, lo entumece y lo imposibilita desde el principio.

Publica tu comentario en Facebook

 

Lo más leído