La banda londinense Fanfarlo aterrizaba en Valencia dentro de su minigira por nuestro país.
La fecha de su bolo venía marcada por una cita futbolística importante como es la final de la Copa del Rey, y pese a este inconveniente, el público respondió muy positivamente llenando el aforo hasta más la mitad.
Fanfarlo venían para presentar su último disco “Rooms Filled With Light” un trabajo que no ha sido bien recibido por parte de la crítica, que lo destaca como una de las decepciones del año.
Y sin embargo Fanfarlo tiene algo que muchas bandas no tienen: cinco músicos como la copa de un pino, cinco artistas polifacéticos que intercambian y alternan instrumentos que suenan a gloria: todos sin excepción.
Algo que hacemos casi siempre mal, a la hora de hablar de música, es querer comparar a un grupo con otro; decir que “es que suenan igual que estos”. Al grupo londinense se le tiende a comparar con la épica resultona de Arcade Fire, pero Fanfarlo han sabido desmarcarse de las similitudes que les relacionan. Para ello han hecho un uso más notable de los instrumentos que los diferencian de los canadienses, como puedan ser la trompeta, el saxo o una batería electrónica, junto a los sintetizadores que acompañan a las melodías de todos sus temas.
El concierto comenzó con puntualidad. Arrancaron con “Replicate”, la encargada de abrir el último trabajo del grupo británico, un tema alegre y colorido, que ayudó a corroborar el más que correcto directo de este nuevo álbum.
Muy pronto sonó la esperada “I’m a pilot” y el público hizo saber a la banda que sigue siendo uno de los temas que más emocionan y que más se disfrutan en directo. Los temas se fueron sucediendo como los instrumentos en manos de los cinco músicos, con fluidez y facilidad, ligeros y ágiles, creando una atmósfera que envolvió la sala Mirror durante los cerca de noventa minutos de concierto.
Mezclando canciones tanto del primero disco como del segundo, pudimos disfrutar de de la gran banda que son Fanfarlo. La voz de Simon Balthazar, casi siempre presente, demostraba que es el “frontman” de la banda. No podemos olvidar destacar el momento “Shiny Things” donde pudimos verle cantar mientras tocaba el saxofón demostrando, una vez más, que Fanfarlo es una banda formada por músicos multinstrumentalistas.
Con un público totalmente entregado se marcharon del escenario con una sonora ovación, para volver y acabar con dos bises, uno de cada disco: “Tunguska” de su último trabajo, un aperitivo perfecto para introducir uno de sus hits más conocidos, “The Walls are coming down”. Con ella, Fanfarlo se despedían del público valenciano, dejándonos con un muy buen sabor de boca y demostrando que cuentan con una extraordinaria calidad que pronto llenará grandes salas.
Un gran cierre del ciclo de Heineken Music Selector, que nos ha traído a Valencia grandes grupos como The Wave Pictures, Dawes, Xiu-Xiu o Clem Snide. Gracias por deleitarnos con artistas de esta talla y, por supuesto, ¡por promover la música en directo!
