Lo que hace dos años conocimos como GameFest, este año se viste con piel de cordero y aparece bajo el seudónimo de Madrid Game Week. Para los gamers que no asistieron a las anteriores ediciones este evento es bastante atrayente. Sin embargo, si ya estuviste años anteriores te quedas con ganas de alguna novedad, algún giro de tuerca. El sistema de la feria es idéntico a su antecesor: stands, demos y publicidad a raudales.
Este espacio se divide en cuatro zonas principales. Predominan Microsoft Xbox y Play Station con stands dinámicos, animación y una tímida presencia de sus bebés (Xbox ONE y PS4 respectivamente). Destacaban por colas interminables para los preestrenos más jugosos (Ryse: Son of Rome) y demos de juegos que ya están en el mercado (The last of us, Batman: Arkham origins, etc)
La tercera ganadora fue Nintendo con sus plataformas portátiles y Wii U. Queda más en segundo plano pero define claramente su filosofía: juegos inocentes y en compañía. Las azafatas de esta zona daban clara muestra de este ambiente familiar.
Por último el cuarto y más proclamado espacio estaba liderado por 
Battlefield 4 y Call of Duty: Ghosts. Los teenagers más bélicos disfrutaron de un montaje impresionante por parte de BF4: un avión de combate, un tanque de guerra, soldados merodeando... Battlefield gana la batalla a Call of Duty por su puesta en escena.
Otros pequeños puntos de interés como el stand de FIFA 14 o las conferencias. Éstas se ubicaban en pleno epicentro, centrándose en temas de programación. 
Por último una exposición de consolas retro y mercadillo; revive las viejas glorias.
Curioso el concurso de Cosplay. Gran abismo entre los participantes, desde los más entregados y originales hasta los más shameless. Risas aseguradas.
Respecto al merchandising encontramos al final de la sala la tienda GAME de rigor, este año repartían viseras de cartón de Mario, la crisis hace mella.
Se echó en falta más puestos de ropa y accesorios. Sólo uno vendió con soltura productos textiles de los videojuegos más aclamados.
Recogemos una buena experiencia. La feria es el reencuentro con un viejo amigo que no sorprende pero divierte. Como es de esperar el ambiente es comercial y acoge a cantidad y cantidad de jugones. Cabe destacar este año la presencia de familias, los padres más freaks inculcan este lifestyle.
