Kenae Efe

Los británicos Keane aterrizan en España para presentar su último LP Strangeland, la primera cita en nuestro país tuvo lugar en el Palacio Vistalegre de Madrid y más de 7.000 personas acudieron al evento.

Con una gira en la que constan más de un centenar de fechas, el show de Keane, que en un principio estaba programado en La Riviera, fue desplazado al Palacio de Deportes Vistalegre por la alta demanda de entradas. Con una puntualidad inusual en las citas musicales, a las 22:00 en punto saltan al escenario Tom Chaplin, Tim Rice-Oxley, Richard Huges y Jesse Quin, para presentar Strangeland, aunque sin dejar de lado sus anteriores trabajos plagados de éxitos.

Sin mediar palabra, rompieron el hielo con "You Are Young", y el público ya entonaba los primeros coros. Tras un educado “Buenas tardes” de parte de Tom Chaplin, los británicos mostraron el primero de sus ases, "Bend & Break", y "On The Road" en la que el teclista, Tim Rice-Oxley se lució especialmente.

La única ocasión en la que pudimos escuchar a la banda con guitarra fue "The Lovers Are Losing", para la que Chaplin demostró que no solo domina sus cuerdas vocales a la perfección, si no que con las de la guitarra también se entiende perfectamente.

La voz de Tom sonaba alta y clara, los instrumentos a veces (al menos en la grada) se compactaban demasiado y eran difíciles de distinguir, por suerte pudimos disfrutar de "Is It Any Wonder?", otro de los más celebrados, Spiralling, "Everybody's Changing" o "Silenced By The Night". La voz resonaba tan fuerte en algunas ocasiones que el mismo Chaplin reconoció sentirse como en el Gran Cañón, ya que su voz nunca había sonado tan fuerte.

Uno de los momentos más deslucidos de la noche fue la interpretación íntima de "Try Again", en la que la voz de Tom Chapling fue acompañada tan solo por el piano, y por el murmullo del algunos miembros del público que se empeñan en fastidiar esos momentos.

Para enfrentarse a la recta final del concierto eligieron tres de sus grandes éxitos: "This Is The Last Time", "Somewhere Only We Know" y "Bedshaped", otra de las íntimas (pero en esta ocasión con más atención por parte del público).

Tras un breve descanso, ya que las más de 7.000 personas allí presentes ansiaban un bis, Keane reaparecieron de nuevo con "Sea Fog", "Soreveign Light Café" y "Crystal Ball", con la que parecía que se despidieron.

Cuando el público comenzaba a salir, las luces aún no se habían encendido, y después de las casi dos horas de recital regalaron una versión de una de esas canciones que nadie debería versionar, "Under Pressure".

Publica tu comentario en Facebook

 

Lo más leído