Wiggum

Tercera edición del festival más simiesco de todo el panorama patrio, un encuentro que va mucho más allá de un cartel.

 

El Monkey Week está encuadrado dentro de lo podíamos llamar encuentros peculiares, y es así porque no es un festival al uso en ningún momento del día. Por las mañanas dedicados a los profesionales, más de 500, donde se puede debatir sobre el panorama de la música actual, además de visitar la feria de stands profesionales donde participan sellos, discográficas, o portales de venta de entradas.

Así pues sin sonar siquiera una sola nota de una guitarra el festival del mono ya lleva ganados unos pocos puntos extras, si a esto añadimos el increíble emplazamiento geográfico del Puerto Santa María la cosa mejora por momentos. El festival además no peca de conformista e implica buena parte del pastel a su circuito de showcases.

Un circuito que tiene como joya de la corona la imponente Plaza de Alfonso X, donde el grupo Wiggum demostró porque lo suyo con el genio Equivocado es amor a primera vista. Presentando las canciones de su Sintón Nisón ama a Nifú Nifá que utilizaron para reafirmar las fuerzas de los estribillos, cerrando con un inmenso “Te Quiero” que acabo por dibujar una sonrisa en la Plaza que empezaba a registrar un considerable lleno para recibir a Mucho.

Mucho es una banda que le costará quitarse el San Benito  que son los ex - Sunday Drivers, pero amigos, que perfectos pero que sosos eran los domingueros, esto se acabó, Martí Perarnau tiene actitud, es descarado y así lo bien que suena en disco, suena mejor en directo, mezcla perfecta de una banda que no falla y pura dinamita sobre unas tablas, no le tembló la voz para decir “Sois unos borrachos” “Esto es el Monkey Week, copón, coponazo de la vida” sus grandes canciones que ya corea y baila el público no faltaron, como  “La casa en pie” o “Si quieres, no” aunque mención aparte merece “Vas a saturar”, extraordinaria lección de pop neo mudéjar o como carajo digan ellos que hacen.

mucho2

Divididos entre ruido y el pop asistimos a Holywater que se presentaron en la sala Mucho Teatro para dar un repaso a su discografía, destacando el tema “in your head” de su último disco. Un recinto de 10, un público animado y un grupo con ganas de agradar no pudieron ganar a un pésimo sistema de sonido, que provocó un abrupto final del concierto pasados apenas 30 minutos. Una lástima.

holywater

El pop quedó en un segundo plano para recibir a Margarita que tronaron la sala Milwaukee, la sala con más solera del festival, con su ya típica poca visibilidad y su sonido amorfo, pero con una propuesta que gusta y convence. “Crudo y Crema” marcó el cenit de una tarde que auguraba una noche antológica.

hawkwind3

El monasterio abrió sus puertas en lo que tras tres años fue su mejor noche de largo. El ajuste desde el último showcase hasta la primera actuación nos hizo naufragar en la primera actuación, Novedades Carmina. Hawkwind, con ese rollo rock industria, comenzaron dubitativos una actuación que por lo pronto llamó la atención los dos bajos que hay sobre el escenario, y como los acordes sonaban en uno de ellos (literalmente), atronador y como un reloj sonaron los alemanes, que por si fuera poco incluyeron en su show bailarinas para delirio del respetable en una actuación sobria pero muy convincente. Tal vez pasados de kilos, y por momentos con una apuesta demasiado ochentera, pero fue un Revival de una sobriedad notable.

nenecherry2

Aunque el nombre que todos esperábamos era el de Neneh Cherry, entre la expectación y el morbo de ver a una estrella venida menos, incertidumbre, curiosidad, y una masa que sabíamos que por lo menos conocería dos temas. Que por cierto dejó para el final, pero la diva apareció con una combinación de falda + nikes que dio a entender que ella había venido a bailar, con una actitud propia de un principiante, y una voz fuera de lo común.

Ha resuciado una estrella!, actitud, y entregadísima al público, todo calificativo es poco, con la sensación que el sitio y el artista eran perfectos el uno para el otro, transcurrió como un abrir y cerrar de ojos el concierto. Que sirvió para saber que tiene temas nuevos, que mezcló con los archiconocidos “Woman” o “7 second” en una actuación memorable, y acompañada por una banda que entre otras cuenta con su bellísima hija, Neneh tomó el puerto a lo grande y desembarcó su voz, que recital vocal. Nada que ver con Cápsula.Que repartieron de lo lindo decibelios, y actitud, entregadísimos, confirmando que Cápsula no son una banda más de un extenso panorama. Son una realidad, mención especial para las dos versiones consecutivas de David Bowie, Starman rebautizada por su cantante como “El quillo de las estrellas” y Ziggy Stardust” para acabar por enloquecer al personal.

meneo2

La última actuación de la noche dio paso a la hora de las brujas, gameboy en mano Meneo a ritmo del Rey León + Dire Strairs apareció con attrezzo pugilístico y comenzó la hora y cuarto más sivergüneza que me he encontrado en un escenario. Meneo ¿qué es? ¿Un genio? o un caradura, o ambos, desde luego que atendiendo a la locura que un servidor sufrió y lo mucho que me divertí opto por lo de genio, increíble sesión de baile con el ya clásico despelotamiento del personal y las idas y venidas de un tipo que dio literalmente marcha atrás en el tiempo y puso la guinda al pastel más grande jamás tomado bajo el amparo del Mono, menuda noche.

Fotos: Jesús  Bragado

Publica tu comentario en Facebook

 

Lo más leído