Hay semanas en las que no ocurre nada en Barcelona, semanas que se presenta el último hype del momento y semanas únicas como ésta en la que en dos días puedes ver a dos genios de la canción de autor como Callahan y Hawley, Richard y Bill difícil soportar tanta clase en tan corto intervalo de tiempo.
Foto: Raquel Calvo.
Todavía sin poder recuperarnos del Shock Callahaniano llega uno de esos músicos malditos, uno de esos valientes que sin importarle el gran público hace y deshace a su antojo para presentar su trabajo más personal con "Truelove's gutter". Un paseo por el lado más oscuro e inaccesible del crooner de Sheffield que no ha escatimado en cortes de hasta diez minutos. Toda una declaración de intenciones y la muestra de que ha decidido echar el resto por hacer aquello en lo que cree. Firma magistralmente un disco en el que cada detalle merece ser estudiado, cada giro vocal a los que nos tiene acostumbrados golpea las sensibilidades más toscas, pero sobretodo un trabajo en el que puede apreciarse de manera clara la naturaleza descarnada de este músico de calidad suprema.
Foto: Raquel Calvo.
También hay vida antes de los genios y en esas telonearon Pájaro Sunrise que en versión reducida nos introdujeron más que dignamente la noche con su Done/Undone. Acompañados de Xilofón, violín, acordeón y acústica la inusual formación sorprendieró a más de uno en apenas tercio de entrada llegada hasta el momento. Haciendo gala de una simpatía espontánea como pocas se ven hoy en día, deleitaron durante algo más de media hora con su pop fok luminoso. A Yuri Méndez y cia les gusta Barcelona y a nosotros que os acerquéis a menudo, exclente elección.
Con puntualidad inglesa se presentó el gentelmen de la canción ante una sala Bikini hasta la bandera, que ya se había rendido antes de empezar y desató su repertorio con "As the dawn breaks" que también abre su séptimo disco. Entre tinieblas llegó el turno de "Ashes on the fire" y "Lady solitude" donde echó mano brevemente de repertorio en el que no faltaron "Hotel room" y "Cole's corner".
Foto: Raquel Calvo.
Hawley estaba cómodo y la comunión con el público así lo testificaba con continuas bromas y referencias rebosantes de una clase al alcance de muy pocos. Tupé al viento y de etiqueta para la ocasión, el mítico guitarrista de Pulp y su porte único estuvieron a la altura de las espectativas. La genial voz lució en todo su esplendor en uno de los temas del disco "Open up your door", con una profundidad que se fundía de forma extraordinaria con el resto de músicos y la extremadamente ténue iluminación. Cortaba el aliento con unos finales instrumentales como en "Remorse code" con una potencia inesperada que mantuvo hipnotizado al público en la recta final del set. Se oían menos aplausos, menor ovación entre canción y canción, el éxtasis acabó fundiendo a los asistentes que en el silencio de la oscuridad ambiental disfrutaban de una conexión con el artista que terminó súbitamente tras "Don't you cry".
Tras el bis la banda al completo salío para interpretar la canción de cuna "Hashabye mountain" seguida de la demandada a voces "The ocean", Dios sabe que hubiera ocurrido si no hubiese tenido cabida en el setlist. Completados 40 minutos de delicioso manjar musical centrado sobretodo en su último disco, nos quedamos con ganas de más, sobretodo de sus "Cole's corner" (05) y Lady's Bridge (07) rebosantes de grandes cortes que se quedan en el tintero a la espera de un show más completo.
Foto: Raquel Calvo.
Setlist
As the dawn breaks
Ashes on the fire
Lady solitude
Hotel room
Soldier on
Coles corner
Open up your door
For your lover
Oh my love give some time
Remorse code
Run for me
Don't you cry
---Bis---
Hushabye Mountain
The ocean
Fotos de Raquel Calvo.
