Territorios cierra una gran edición
Diecisiete años ha cumplido este año el Territorios de Sevilla, una casi mayoría de edad que ha confirmado por cuarto año consecutivo la aglutinación de diversos tipos de músicas en dos jornadas centrales. Lejos quedan los dos fines de semana con cuotas diferentes de público en función de la temática diaria, esta globalización de la cita trae consigo que el sábado pudiéramos ver desde a Ska-P a Lori Meyers pasando por Reincidentes apenas moviéndonos unos metros.
A pesar de estar en Sevilla, la final de champions se hacía presente en el recinto, ya que el escenario principal se encontraba a media asta para dar la bienvenida al primer gran nombre de la noche, los granadinos Lori Meyers. No debió de ser plato de buen gusto para alguno de sus componentes, Atléticos declarados, salir a tocar mientras tu equipo se jugaba la fatídica prórroga, es por eso que se mascaba un monumental retraso en el comienzo. Nada más lejos de la realidad, a las once y seis minutos en un escenario decorado con los iconos de “Impronta”, pantallas circulares incluidas salía el sexteto, demostrando que cuando uno ocupa la parte de arriba de un cartel hay que dar un puntito más. Y Lori Meyers lo tienen y lo dieron, les sobran hits para que la histeria brote por cualquiera de las filas, los primeros acordes de “Planilandia” o “Luces de Neón” bastan para que, ahora sí lleno, una muchedumbre con ganas de fiesta haga un karaoke al alcance de pocos. Los mejores momentos llegaron con la banda asentada.
No soy muy amigo de las colaboraciones entre amiguitos, pero he de reconocer que Anni B Sweet lució y mucho “El Tiempo de pasará” y que los momentos de Ale a la voz cada vez me gustan más, más si no se le olvida hacer de Morrissey con “De los nervios”. La parte final lanzando toda la artillería, “Aha Ha
vuelto”, “Religión”, “Alta Fidelidad”, “Emborracharme” o “Mi Realidad” salieron de la boca de Noni como si estuviera insultando al público, qué manera de echarse al público en el bolsillo.
Como partes menos lustrosas de la actuación destacamos que echamos de menos el acercamiento futbolísitco en “Dilema” (no estaba el horno para bollos), que nos jode sobremanera que Noni se haya olvidado, a favor del karaoke facilón, que en el estribillo de “Tokio ya no nos quiere” existe aquello de “Si te quieres venir ahora ya no hay vuelta atrás” y que como siempre para los fans de largo recorrido, como el que escribe, siempre queremos más canciones de los primeros discos pero esto no es achacable, ayer había que hacer lo que hicieron, ganar la champions sobre las tablas del Territorios.
Del indie mainstream pasamos al sonido rabioso y guarro procedente de Argentina. El Mató A un Policía Motorizado en el escenario que todavía nos traslada a los años intermadios del Territorios desplegaban el sonido de sus guitarras a grito de “Nuevos discos, Nuevas drogas”, si los Planetas hubieran hecho está canción no me imagino lo que hubiera pasado, la primera en la frente. Y su frontman, una mezcla entre “Big Muzzy” y Enrique Morente, nos tenía enamorados. Sus movimientos de juego con el micro y su manera de cantar con el cuerpo completamente agachado llamó poderosamente la atención pero sin deslucir el magnífico sonido que allí había. Su set vino soportado por “La Dinastía Scorpio” con momentos realmente intensos y sucios como “Mujeres Bellas y fuertes” o “Yoni B” con J de Los Planetas sobre el escenario sin poder llegar a los altos de la canción pero quedando una colaboración natural y agradable. Grandiosa, no podía ser menos, actuación de la banda con un set bien elegido, concierto con sentido y acorde al festival.
El momento más polarizado de la noche llegó con los irreverentes Ska-P, su música es sinónimo de fiesta y triunfo, ejercieron como grandes estrellas poniendo una formación musical de por lo menos diez personas que hizo que el show tuviera vida propia. Una decoración algo austera que no correspondía con lo que allí había montado pero lo que faltaba de teatro lo iban a compensar con actitud, el público no falló y abarrotó como nunca el principal.
Su música y su flow funcionan, pero su discurso político nos parece algo anticuado, no entendimos demasiado la reivindicación sobre el pueblo palestino, un brindis al sol no por el mensaje sino porque a lo mejor no era el momento más adecuado, en cambio en “Romero el Madero” no lanzaron ningún tipo de mensaje actual sobre el abuso de autoridad o la demonización de twitter. Cada uno puede hacer lo que salga de los huevos con su trabajo pero desde fuera queda algo inconexo el parar una fiesta para hablar de un tema tan serio. Por lo demás cuando sonaron “El Gato López” o “El Vals del Obrero” muchos rejuvenecimos muchos años y comprobamos que los madrileños han adaptado su música a los tiempos y a sus medios, gran sonido, especialmente bien los vientos para comprobar que el Ska no entiende de fronteras, notable muy alto en lo musical, aprobado raspado en la línea del concierto.
Pero si había un momento importante en esta noche ese era el Homenaje que se le había preparado a Triana. Este homenaje tenía como capitanes generales a Antonio Lomas (freelance del ritmo) y Miguel Rivera de Maga, una banda fija de cuatro músicos permanecería inamovible para ir recibiendo a diversos invitados para llevarnos por la evocación soñadora de un viaje lisérgico pasando por el barrio de Triana. El primero en aparecer Jota de Los Planetas para hacer “Recuerdo de una noche”, a pesar del retraso la cita empezaba bien aunque iba a ser una actuación delicada.
El homenaje tuvo algunos errores de bulto, las transiciones entre artistas eran larguísimas y el frío no perdonaba y además nadie presentaba a los que iban subiendo al escenario y por supuesto que un homenaje a Triana en Sevilla debió de ser algo más solemne, se aplaude el riesgo y la actitud de la banda que se mantuvo fija, lo de Lomas es de nota, pero esto hay que pulirlo.
También hubo grandes momentos artísticos como la subida con la guitarra española de Ale de Lori Meyers haciendo lucir a Noni en “Todo es de color” y diciendo eso de:
Qué bonita es la primavera.
Qué bonita es la primavera
cuando llega.
El clavel que tienes en tu ventana
me hace recordar el barrio de Triana
Y no fue lo único, el Niño de Elche en “Hijos del agobio” dando uno de los momentos más flamencos de la noche, o Soleá Morente haciendo “Sé de un lugar”, la electricidad que desprendió un genio de estas cosas como Antonio Arias, elmaestro Veneno poniendo color con “Quiero contarte” o el cierre con la archiconocida “Abre La puerta” fueron buenos o grandes momentos, aunque el más sentío lo dio Andrés Herrera (Pájaro) con un claro y honesto homenaje a Triana. Pero también los hubo penosos, especialmente sangrante el de otro Sevillano como Antonio Luque haciendo una desafortunadísima “Señor Troncoso”, joder cómo te engañaron Chinarro. Lo dicho, no fue lo que todo el mundo esperaba pero esto puede ser muy interesante aunque hay que pulir algunas cosas,
Este año solo asistimos al sábado del Territorios pero hemos de decir que la organización lo tiene, grandísima facilidad para movernos por todo el recinto, minúsculas colas y sobre todo gran logísitca y sonido, a por la mayoría de edad a lo grande.
