Ainara Legardon We Once Wished

Ainara LeGardon

We once wished

[Aloud Music; 2011]

7.5


 

Mucho estamos escuchando hablar de Ainara Legardon últimamente. No obstante muchos comentaron que fue una de las actuaciones más destacadas en el pasado Monkey Week (yo desgraciadamente me lo perdí) y se ha confirmado hace escasos días que estará compartiendo escenario principal en el Primavera Sound con otros grandes artistas de la talla de Pj Harvey, Mogwai... Debo reconocer que ‘We Once Wished’ (Aloud Records, 2011), es el primer trabajo que llega a mis manos de esta talentosa artista de 35 años nacida en Bilbao, así que recapitulando un poco, uno comprueba sin demasiada dificultad que tiene un currículum más que envidiable. Con tres discos anteriores a sus espaldas en los que contó con la colaboración de artistas de la talla de Joe Skyward (Sunny Day Real State, The Posies), Chris Eckman (The Walkabouts), David Jiménez (A Room With A View) y un largo etcétera… Ha girado además por EEUU y compartido escenarios con artistas sobradamente conocidos como Damien Jurado o Bonnie Prince Billy. Lleva más de 20 años subida a los escenarios y después de su último y bien acogido disco, ‘Forgive me if i don’t come home to sleep tonight’ (Winslow Lab Records, 2009) Ainara LeGardon regresa de la mano de Aloud Music, con sonido renovado.

Centrándonos un poco en el ‘We Once Wished’, lo primero en lo que nos fijamos es que Ainara Legardon incorpora a ese estilo de rock-folk oscuro e inquietante, donde predominaban guitarras acústicas, una poderosa base rítmica formada por bajos sucios, baterías potentes y distorsiones de guitarra muy contundentes, haciendo de este ‘We Once Wished’ su disco más rockero, un rock sucio con una clarísima influencia de los 90… No obstante a mí este sonido me recuerda mucho a otros artistas de Touch and Go (Nina Nastasia, Slint, Shellac, The Jesus Lizard…) y por supuesto a otras vocalistas femeninas como Pj Harvey, Kristin Hersh o Tori Amos... ‘casi ná’. Desde el primer momento con ‘You Gave Me’ la artista nos deja claro que se ha dejado las entrañas con este disco: ‘ I gave you six parts of me, seven if you count this one’ dice. Y no es para menos, letra tormentosa, compleja y oscura al igual que las melodías que la acompañan y componen este genial primer corte.’ I Left ‘ empieza con una suave melodía de guitarra rasgada, no me extraña nada que Geoff Farina de Karate haya quedado prendado con ella. Preciosa canción de amor, nocturno y desesperado a ritmo de slowcore que da paso a ‘We Once Wished’, el tema que da título al disco y para mi gusto una de las mejores canciones. Con la dulzura propia de Kristin Hersh y también con una mala ostia considerable propia de la etapa grunge, este tema tiene un riff explosivo que en directo debe ser una delicia. Con ‘Hugs that wont Last’ Ainara LeGardon sigue en la misma línea, un nuevo estilo que a mí me abruma de sobremanera. Riffs sucios, crudos, grasientos…distorsiones, acoples, rabia acumulada, aderezada con esa voz tan dulce con la que es capaz de decirte ‘Don´t worry, babe, I leave tomorrow’ y quedarte tú tan contento. ‘Reason’ el quinto corte, es un tema mucho más calmado, en la onda de sus anteriores discos, pero a su vez con ese toque eléctrico que predomina a lo largo del ‘We Once Wished’. Junto con el siguiente tema ‘I Am’ forman un interludio que a algunos se les podría hacer un poco largo, sobre todo después del frenético ritmo marcado por los primeros temas, sin embargo para mí es un señor tema, muy lento, casi tribal y con aires inconfundibles de stoner rock, al estilo Mark Lanegan o Brant Bjork. El siguiente corte, ‘Thisty’ es mi favorito, aunque quizás esté influenciado por el genial video que lo acompaña y también porque fue el primero que escuche de este disco. Rápido, directo, intenso, desgarrado…todo esto en menos de dos minutos de canción y con una línea de bajo que hubiera firmado el propio Joe Lally de Fugazi. ‘Evil Eyes’ es otra canción de desamor, como prácticamente todas las del disco, también con esos toques de noise rock/grunge combinando partes muy lentas con versos furiosos y ritmos trepidantes a partir del primer minuto. ‘Before Waking Up’ es el penúltimo tema, brillantemente oscuro diría yo, el que colabora Hannot Mintegia de Audience que añade unas vocales en forma de gritos desgarrados y trompetas perturbadoras a lo freejazz y que aportan muchísimo a este tema, para darle ese toque de locura contagiosa y alterada que impregna todo el disco. Con el bajo sobresaturado de ‘Make It Mine Forever’ y un ritmo lento de batería, Ainara LeGardon pone fin a este grandísimo disco, oscuro, intenso y que para mi debe marcar un antes y un después en la carrera de esta gran artista. Sin duda, Aloud Music, nos ofrece uno de los discos más destacados en lo poco que llevamos de año, que debe ser el año de la consagración definitiva de Ainara LeGardon.

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