Guadalupe Plata y The Hollers, la pareja perfecta. Las dos bandas convirtieron su actuación en una auténtica fiesta, en el Wild Winter malagueño.
Foto: César Moreno
En la vida hay oportunidades que no se pueden dejar pasar. La de ver en directo a dos bandas con un directo tan impresionante como Guadalupe Plata y The Hollers por sólo seis euros es una de ellas.
El ciclo Wild Winter, que desde el mes de octubre ha traído a Málaga a lo mejor del indie patrio, acertó de pleno al juntar a los dos grupos, que ya actuaron en la edición veraniega del festival y demostraron que la escena rock andaluza está más viva que nunca. Los malagueños The Hollers fueron los encargados de romper el hielo, cosa no muy difícil en parte por la predisposición del público que se reunió en La Caja Blanca. El trío jugaba en casa, cómodo ante sus amigos y conocidos, y se lució con su repertorio de garage ruidoso y blues salvaje, que mantiene el nivel desde “My Soul Between Your Legs”, canción con la que empezaron, hasta el último bis, “Tired of Crying”. Tras este último tema The Hollers pasaron el testigo a otro trío, Guadalupe Plata, una banda en pleno ascenso que empieza a recoger los frutos de su trabajo (actuaron hace unos meses en el festival SXSW de Austin y han ganado el premio de las Fiestas Demoscópicas 2010).
Foto: César Moreno
Guadalupe Plata sobre las tablas son los reyes del mambo. La apuesta es simple pero arriesgada: tres hombres de Cromagnon aporreando una batería, una guitarra y un bajo que en otras ocasiones no es más que un barreño con un palo y una cuerda. Pero el blues-rock sucio y primitivo que despliegan en sus actuaciones los ubetenses conquista y pone a bailar al más popero, y no necesitan hablar mucho ni con el público ni en sus canciones para adueñarse de un espacio inhabitado en el panorama alternativo nacional. Canciones como “Pollo podrío”, “Jesús está llorando” o “Baby me vuelves loco” son una inyección de fe en el rock and roll. Hoy en día, de lo más puro y auténtico que se puede ver en concierto. Larga vida a Guadalupe Plata.
