Lapido inicia su gira en el Wild Winter de Málaga con buen pie El espectáculo fue un repaso de su exitosa carrera en solitario.
Foto: César Moreno
Como no podía ser de otra manera, José Ignacio Lapido se presentó sobre las tablas con su inseparable Gibson SG al hombro y acompañado de su banda, tan unida a él como la E Street Band a Springsteen. Comenzaba así la gira de su último disco, De sombras y sueños, el sexto de una trayectoria intachable que cumple ya once años y que ha conseguido algo al alcance de muy pocos: repetir los logros alcanzados por 091, la banda que marcó un antes y un después en la música independiente andaluza.
Lapido eligió para su vuelta a los escenarios el Centro Cultural Provincial de la Diputación, que llenó todas sus localidades con el fiel público del artista granadino, ese que en su juventud disfrutó con 091 y ahora suma años con las canciones de José Ignacio. Ese mismo público que salió de la sala sabiendo que había asistido a un espectáculo único y genial, y que las dos horas (con dos ovaciones que obligaron a la banda a volver al escenario) de buena música que acababa de ofrecer Lapido valían todos y cada uno de los euros de la entrada.
Aunque pidiera disculpas a la audiencia al comienzo del concierto por los nervios propios del primer show de la gira, lo cierto es que en directo Lapido no acusa en ningún momento los años de carretera que lleva a sus espaldas. En 120 minutos de temas sin descanso (apenas habló un par de veces entre canción y canción), el “maestro”, como le gritaban algunos fans, mezcló los mejores temas de sus cinco primeros discos con los de su último trabajo y con algunos préstamos de 091 (los más coreados, como “La canción del espantapájaros”). De sombras y sueños apuesta más por los medios tiempos (“Olvidé decirte que te quiero” o “En medio de ningún lado”) que por ritmos más acelerados de anteriores trabajos, pero sigue manteniendo el nivel en las letras, uno de los puntos fuertes de la música de Lapido . Rock de calidad, al fin y al cabo, es lo que hace el músico de Granada, que recibió ayer de los malagueños una inyección de moral cara a las próximas fechas de un tour que demuestra que José Ignacio Lapido aún tiene mucho que contar.
