DSC 0085

La gira otoñal de The New Raemon daba comienzo en la madrileña sala Joy Eslava, un perfecto lugar para un recital que nos dejó sin aliento.

Como aperitivo, le acompañaba María Rodés, una voz delicada que viste canciones envolventes e inusuales que bien merecen una oportunidad, como la Nana del Agua. En la que María nos invitaba a hacer sonidos acuáticos, pero ante la cual el público permaneció respetuoso y atento a la actuación de la artista.

Y, por fin, aparecía en escena Ramón, acompañado de su banda, enfundado en su chaqueta, como siempre. Abriendo con temas de su trabajo más oscuro, hasta la fecha, ya que nos aseguró que el siguiente lo sería aún más. Lo Bello y Lo Bestia, Kill Raemon, La Vida Regalada y Algunas Personas del Valle fueron las primeras en saltar a escena y demostrar, una vez más, que en directo todos los temas se ven dotados de mayor sonoridad y fuerza.

El primer punto de inflexión, sobre Libre Asociación, fue protagonizado por Sucedáneos, a partir de éste momento si no habías sufrido ningún escalofrío o erizamiento es que estabas muerto. Entre bromas de Ramón y freestyles de ensayos de anuncios radiofónicos de madrugada -Sé mi esclava en la Joy Eslava- sonaron canciones de todos sus trabajos. El Fin Del Imperio, la cual nos confesaba que es una de sus favoritas y que llevaba mucho tiempo sin tocar y sonó espectacular e íntima. También vio la luz Aspirantes, sobre la que nos contaba y se disculpaba por adelantado porque nunca la habían interpretado en directo. Todo esto nos llevó hasta el final de la primera parte, en la que sonó como broche de lujo Verdugo.

DSC_0168

Para el bis, apareció en principio Ramón, sólo con su guitarra, para tocar su particular versión de Te Debo Un Baile, de Nueva Vulcano. Y la que posiblemente fue la más coreada de la noche Tú, Garfunkel, que empezó en modo íntimo y a la que se unió de nuevo la banda, para terminar con un guiño a AC/DC. El broche final, y la lágrima segura, lo pusieron Por Tradición, Soñar La Muerte y Llenos de Gracia.

Un recital plagado de emociones, y en el que, aunque al principio no sonara todo lo bien que nos hubiera gustado, nos demostró una vez más que en su modo intimista o más enérgico The New Raemon sabe provocar todas nuestras emociones.

Publica tu comentario en Facebook

 

Lo más leído