Two Door Cinema Club
Beacon
[Kitsuné; 2012]
4
Pasados dos años, Two Doors Cinema Club presentan su nuevo álbum “Beacon”, grabado el pasado Abril en Los Ángeles, producido por Jacknife Lee (productor de U2, R.E.M, Bloc Party). Desde hoy 3 de septiembre ya lo tenemos disponible.
Aún recuerdo cuando llegó a mis manos a finales de 2010 “Tourist History”, era la primera vez que oía hablar de este grupo y reconozco que escucharlo resultó una experiencia gratificante, sobre todo por el echo de comprobar que aún existen algunos Irlandeses que son capaces de aportar novedades extremadamente interesantes al panorama musical.
Con el mismo júbilo he recibido el nuevo LP de este trío, esperando encontrar nuevas sensaciones y después de dos años de espera estaba ansioso de escucharlo. Nada más lejos de la realidad. Nuevamente topamos con un grupo que innovando en su primer disco, decide encasillarse en aquello que ha resultado rentable y ofrecen más de lo mismo. Con esto no quiero decir que no vaya a gustar, solamente que es una continuación del anterior, no se aprecia la evolución de un grupo que ha estado girando y experimentando durante un tiempo, solamente tenemos composiciones correctas y lineales, fáciles de escuchar.
Según su cantante y guitarrista Alex Trimble comenta “…“Beacon” es un disco más íntimo que el primero, pero a la vez más grande y variado. Alcanzar ese equilibrio ha sido siempre nuestra meta, y este álbum nos sitúa un paso más cerca de la banda que siempre hemos soñado ser…”
En general seguimos escuchando la eléctrica de sus guitarras, aunque apuntan algunas pinceladas de electrónica, que probablemente sean la gran aportación del disco.
Desgranando el disco, diré que me parece un buen inicio “Next Year”, dejando patente que arrancan con fuerza y que el disco se dejará escuchar no sin mover los pies de lado a lado, y dejan bien marcado lo que va a ser el resto del disco. En esta canción se desnudan por completo musicalmente resultando un pequeño resumen del resto de temas.
Una vez entrados en la dinámica nos ofrecen “Handshake”, siguiendo con el ritmo desaforado y melódico, que funcionará como una bomba en los directos que están acostumbrados a regalarnos. Sin descanso continuamos con “Wake up”, que nos recuerda puntualmente a los temas que teníamos en “Tourist History”.
Escuchando “Sun”, es cuando me di cuenta de que este grupo se estaba acercando peligrosamente a la zona de no retorno dentro de esa burbuja que encasilla a los grupos y de la que difícilmente se puede salir. Repito, tema agradable, sencillo de escuchar y con bonitos cambios de ritmo, pero esperábamos más de ellos y en este tema podrían haber desplegado todas las sensaciones y experiencias de estos dos años.
A pesar de manternes el tipo con los clásicos arreones de percusión en “Sleep Alone” y “Someday”, son temas bailables y divertidos donde los haya, sin embargo me quedo con la expresión de “The World Is Watching”, que asemejo a “Sun”, en ambas tenemos el quiero pero no puedo que denotamos en gran parte del disco.
“Settle”, consigue conjugar con maestría la melodía y la composición musical con la voz de Alex, de manera magistral, tal vez la estrella del álbum y desgraciadamente, desde este punto el disco decae estrepitosamente, con “Spring”, y “Pyramid” en la que denota que la banda pone toda la carne en el asador y supongo que habrá fans que flipen con este tema, pero sintiéndolo mucho creo que juegan con subidas rápidas y paradas calculadas para obtener la aprobación de un público que es más crítico de lo que podrían imaginar.
Lastimosamente cierro este relato, con el mal sabor de boca que le deja a un niño en su cumpleaños una camiseta cuando esperaba una bicicleta. Tengo por seguro que mejorará mi mal sabor de boca cuando vea defender el disco en directo, pero mientras tanto diré que esperaba mucho algo de este grupo, siento tener que suspender este segundo disco, debido a las grandes expectativas que tenía de ellos. Espero poder redimirlos en su próxima entrega.