Bueno, antes de nada quiero decir que si no has jugado nunca a un juego de Mario es que no has tenido infancia. O eso, o es que no eres de este planeta, así que léete este artículo rapidito y corre a recuperar el tiempo perdido. Dicho esto podemos empezar.
El primer juego con este nombre, Super Mario Bros, vio la luz en el país del sol naciente el 13 de septiembre de 1985 para la consola Family Computer de Nintendo. Un año después aterrizaría en tierras occidentales para nuestra amada Nintendo Entertainment System. La mente loca de la que se escapó este juego fue la de un tal Shigeru Miyamoto, artífice de los mayores ingenios que la compañía nipona ha cosechado, y padre de los videojuegos tal y como los conocemos hoy. Otra de las mentes maravillosas que llevaron a cabo el proyecto fueron Takashi Tezuka, al mando de la programación, y Koji Kondo, compositor de las melodías que hemos tarareado durante toda nuestra vida y que se han instaurado como banda sonora de la cultura pop.
Creo que no hace falta decir que Mario es uno de los pocos personajes de videojuegos que no necesita presentación, de hecho, sin pensamos en videoconsolas será su imagen la primera que se nos pase por la cabeza, convirtiéndose en el principal embajador del conocimiento video lúdico. A día de hoy su presencia es más notoria y reconocida que la del propio Mickey Mouse. Vamos, un icono popular en toda regla.
CÓMO SE JUEGA
La mitología de esta saga no es muy compleja que digamos, Bowser (también conocido como Koopa), que se aburre mucho y es muy poco original, rapta reiteradamente a la princesa Peach, a lo que el fontanero bigotudo decide ir en su rescate. Punto. Este es el complejo argumento que se r
epite una y otra vez en cada nueva entrega. Menos mal que esto no es lo importante en este juego.
Para rescatar a la susodicha tenemos que atravesar una infinidad de fases plagaditas de plataformas y secuaces de Bowser con una inteligencia nula pero muy puñeteros. Para ello se valdrá de diversos ítems como las famosas setas (sin comentarios) que otorgarán a Mario diversas habilidades, como por ejemplo lanzar bolas de fuego.
Lo que parece lo más normal del mundo ahora, en su día fue toda una revolución, porque aunque ya existían otros juegos plataformeros aun apenas se había visto el scroll, ese efecto que hace que nuestro personaje se mueva de un lado a otro de la pantalla mientras el fondo va progresando suavemente. Tan simple como eso. Además el juego estaba repleto de pequeños secretos y curiosidades, como por ejemplo atajos a otras fases, de esas que iban pasando de boca en boca y que otorgaban al título de cierta magia.
CURIOSIDADES
La primera aparición de Mario no fue en este juego, en 1981 el encargado de rescatar a Pauline de las zarpas de Donkey Kong también fue Mario, que aunque ya poseía la misma apariencia aún no tenía un nombre oficial, pasando desapercibido por aquel entonces con el mote de Jumpman, a secas.
El juego Donkey Kong en un principio estaba enfocado para ser un juego de Popeye, pero al final Nintendo no pudo hacerse con la licencia. Años más tarde si se hicieron con los derechos, pero no tuvo tanto éxito.
Más tarde, en 1983, haría de nuevo acto de aparición en el juego Mario Bros (sin el Super), en otro juego de saltos, pero sin scroll, donde saldría muy bien acompañado por primera vez de su hermano Luigi. Todos estos juegos fueron paridos por mi admirado Miyamoto.
La segunda parte de Super Mario Bros que vimos por occidente no era en realidad un juego de Mario, me explico. Cuando salió a las calles japonesas Super Mario Bros 2 el juego era tan difícil que los dirigentes americanos de Nintendo se asustaron y pensaron que hundiría la franquicia. Así que decidieron coger un juego llamado Doki Doki Panic en Japón y transformar a sus protagonistas en los personajes principales del universo Mario. Años después la segunda parte original del fontanero se lanzó en Europa y America en el recopilatorio Super Mario All Star para Super Nintendo, pero esta vez con el nombre Super Mario Lost Levels.
La franquicia de Mario es la más vendida de la historia, habiendo colocado más de 200 millones de copias en todos los hogares del mundo. Eso sin contar las descargas digitales. Al parecer Mario recibe su nombre en homenaje al casero de origen italiano de las oficinas americanas de Nintendo, Mario Segali, con el que se dice que guardaba cierto parecido.
El personaje de Yoshi, que no aparece hasta Super Mario World (1990) de Super Nes, quería haber sido introducido por Miyamoto desde el primer juego de Mario, pero las capacidades técnicas de la época lo impedían.
Hablando de incapacidades técnicas, para que Mario pudiese volar en Super Mario Bros 3 tuvieron que injertarle al propio cartucho un chip de apoyo, ya que la antigua Nes era incapaz de mover un scroll lateral y superior simultáneamente sin que hubiese ralentizaciones. Así que no quedó más remedio que dopar el cartucho.
Para poder volar en el tercer juego de la serie Mario se transformaba en Tanooki al coger cierta hoja. El tanooki es una especie de mapache típica de Japón al que se le atribuyen diversos poderes mágicos en la mitología nipona.
EXPERIENCIA PERSONAL
Super Mario Bros fue el primer videojuego al que yo recuerdo haber jugado en mi vida, creo que con eso está todo dicho. Desde aquel momento en el que mi primo me mostró las posibilidades de aquella cajita gris, aún desconocida para mí, aquella locura llamada videoconsola se convirtió en mi oscuro objeto de deseo. Con el tiempo, y la influencia de mis amigos, terminé adquiriendo una Master System II, que era más barata, argumento de peso para mis padres. De esta forma me convertí en un fanboy de Sega y defendí a capa y espada el honor de Sonic en el patio del recreo, frente a las hordas del bigotudo gordinflón, que se había convertido en mi enemigo. Qué épico me ha quedado esto.
Pese a todo, es obvia la huella que Mario dejó en mí. Y quizá si no hubiese sido por aquel primer contacto hoy no sería tan aficionado a los videojuegos. Aunque seguramente hubiese terminado enganchado a cualquier otro vicio…
POR DÓNDE EMPEZAR
Si estás leyendo esto doy por hecho que nunca has tocado un juego de Mario, por tanto abre bien los ojos y lee atentamente. Los juegos de Mario son probablemente los videojuegos más accesibles del mundo, así que si no juegas a esta saga es porque no quieres. Si no eres un experto te recomiendo que empieces por el principio del todo, Super Mario Bros, que no es especialmente difícil, salvo las últimas pantallas. Puedes descargarlo mediante la Consola Virtual de Wii, un sistema de descarga por internet muy fácil de usar, similar a la Eshop que ya os expliqué en su día. También hay diversas páginas pululando por la red donde podéis jugar directamente al juego desde el navegador de vuestro ordenador, sin descargas y de forma gratuita. Aunque sinceramente no sé hasta qué punto es esto legal. Algo parecido pasa con los emuladores, que aunque sean legales no puedes jugar a algún juego con ellos a no ser que tengas una copia original de ese mismo juego. Pero bueno, eso ya es responsabilidad de cada uno.
Puestos a pedir algo más modernete echadle el guante a New Super Mario Bros, que podréis disfrutar en vuestra Nintendo DS y 3DS y que aún encontraréis en las tiendas. No os confundáis con el reciente New Super Mario Bros 2, que solo es compatible con 3DS.
Siguiendo con New Super Mario Bros, encontraréis a vuestra disposición la versión de Wii, también os servirá como un buen comienzo para la saga. No obstante podéis darle una oportunidad a alguna versión tridimensional de la dinastía, como el magnífico Super Mario Galaxy de Wii, o el maravilloso Super Mario 64, para mí el mejor plataformas tridimensional de la historia. Éste está disponible tanto en DS, en versión física, como para Wii en versión descargable. No los dejéis pasar.
Si después de todo esto seguís hambrientos de aventuras por el reino Champiñón, por favor, echarles un vistazo a los clásicos Super Mario Bros 3 y Super Mario World, los mejores para mi gusto. Eso si no lo jugasteis durante vuestra niñez, que es lo más probable, si no ya os digo que no tuvisteis infancia.
