Corría el año 1987 cuando aparecía en Japón (para variar) un juego llamado Rockman para Famicom (la Nes japonesa) sobre un personajillo vestido de azul que saltaba y disparaba sin parar, y que a la postre haría las delicias de toda una generación.
El arrollador éxito del juego se transformó en una prolífica saga con infinidad de juegos en distintas plataformas con diferentes géneros. En occidente el juego pasó a llamarse Megaman.
El padre de la criatura fue un tal Keiji Inafune, un japonesito muy majo que trabajaba para la compañía Capcom (dueña de los derechos del juego) que se erigió como cabeza visible de toda esta dinastía, encumbrándole como uno de los desarrolladores de videojuegos más importantes de la historia. Años más tarde, en una entrevista, Inafune reconoció que pese a ser el máximo responsable del diseño de toda esta serie de juegos el esbozo original del personaje fue de un tal Akira Kitamura, que contribuyó de forma notable en la saga.
Para que os hagáis una idea del argumento, la cosa va de que un tal Dr. Light creó en el año 20XX (un futuro hipotético, vaya) una serie de robots, cada uno con funciones específicas, para que ayudasen a la humanidad. Su colaborador, el Dr. Wily, corroído por la envidia ante el genio de éste reprogramó estos androides y los utilizó con fines más lucrativos. Para impedirlo, el Dr. Light se apoyó en Rock, un androide que había creado como ayudante al que convirtió en una máquina para la batalla dotándole de ese típico brazo-cañón.
CÓMO SE JUEGA
Es un plataformas de acción con muchos disparos en el que tenemos que llegar al final de cada fase y destruir a cada uno de los Robot Masters para conseguir su arma, que después podremos utilizar en el resto del juego y que nos facilitará bastante las cosas, ya que ciertos enemigos son más vulnerables a ciertos ataques.
Nuestra maña con el pad es muy importante, siendo Megaman una de las sagas de videojuegos más exigentes y difíciles que existen. Así que si os queréis enfrentar a ella armaos de paciencia.
Existen otras subsagas como Megaman Legends, que se acercan más al género del rol, y del que no hace mucho se canceló una secuela por culpa, en parte, del abandono de Inafune, que salió de Capcom para fundar su propia empresa. Esto ha acarreado una serie de consecuencias en detrimento de la considerada por muchos mascota de Capcom, y es que sumergidos en pleno aniversario del primer juego (25 años), lo único que se espera para conmemorar la saga es la aparición de un juego de dudosa calidad para iOS, lo cual hierve la sangre de de los fans, que esperaban mucho más para tan señalada fecha.
CURIOSIDADES
El juego cambió de nombre en occidente porque en América ya estaba registrado el nombre de Rockman. Aunque también existe la teoría de que en Capcom América no veían muy comercial el nombre original Japonés. Y ese fue el nombre que llegó a Europa, como casi todo por aquel entonces, que primero pasaba por el filtro americano. Sinceramente me quedo con el nombre occidental, estoy de acuerdo con los yankis, no termina de convencerme Rockman.
Megaman es conocido popularmente como “Blue Bomber”, por cuestiones evidentes. Aunque durante el juego, cuando cambia de arma también muda el color de su traje.
Se dice que en un principio el juego original sería destinado a los salones recreativos. De ahí el sistema de puntación que aparecía en el primer juego, y que nunca volvió a verse.
Inafune reconoce haberse inspirado en el popular juego de “Piedra, papel y tijera” para el sistema de debilidades de los Robot Masters (y demás enemigos).
La saga tiene claras alusiones al famoso manga Astroboy, al cual recuerda en numerosos aspectos.
En la versión japonesa todos los personajes principales tienen nombres que hacen referencia a la música, más que nada por la afición de Inafune (“Inafking” para los amigos). De hecho el Dr. Light también creó un androide femenino, llamada Roll, que hacía las veces de hermana de Rockman. Rock and Roll, un cachondo este Inafune…
EXPERIENCIA PERSONAL
Durante mi infancia fui un seguero empedernido, me crié entre Master System y Megadrive, y veía con desprecio este juego del personajillo azul que solo estaba disponible en consolas de Nintendo. Así que no fue hasta hace bien poquito tiempo que encontré en una famosa tienda de segunda mano el primer capítulo de esta saga para Game Boy, al principio rehusé jugarlo por su dificultad, pero con el tiempo el juego me encandiló y con un poco de estoicismo terminé disfrutándolo y acabándolo. Tras esta experiencia no pude evitar buscar más juegos de Megaman, y a día de hoy cada vez que cae uno en mis manos me siento afortunado.
POR DÓNDE EMPEZAR
Afortunadamente jugar a algún Megaman clásico no es ningún problema gracias a las plataformas de descarga digital de las consolas y smartphones actuales.
Veamos, si no tenéis mucha experiencia con este tipo de juegos os recomiendo empezar por alguno facilito. Tenéis al alcance de la mano Megaman 10, un juego que recrea la estética de los juegos de Nes y que podéis descargar tanto de Playstation Network, de Xbox Live Arcade, como de WiiWare. En este juego podréis seleccionar el nivel de dificultad, todo un acierto por parte de Capcom.
Si queréis ir un poquito más allá podéis jugar al Megaman X, que en su día corrió por los circuitos de Super Nintendo, y no, no tiene nada que ver con Megaman 10. Este fue en su día la evolución de la saga, dándole un toque de madurez, pero guardando la esencia de anteriores capítulos. Lo encontraréis en la Consola Virtual de Wii, y en dispositivos iOS.
Y si insistís en rememorar y descubrir los antecedentes de la saga seguid mirando en las plataformas de descarga de vuestros dispositivos. Creedme si os digo que al final os terminará embelesando.
