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Wild Nothing

Nocturne

[Captured Tracks; 2012]

6


La estela de Jack Tatum es el camino de baldosas amarillas marcado por bandas que trabajan con el olor a casero, ese Lofi de cotas pretenciosas y de resultados preciosistas, bandas como Washed Out o Ariel Pinks. Genios que parecen sacar canciones como rosquillas con una facilidad notable.

Jack Tatum, líder y cerebro de Wild Nothing, mantiene el rumbo de su predecesor “Gemini” pero con un toque mucho más elaborado, ese sonido de “andar por casa” ha quedado matizado con una producción mucho más cuidada que él mismo ha supervisado de manera “casi enfermiza” y es que no deja que nadie interfiera en su trabajo.  Con arreglos orquestales decisivos para “Shadow” que pone el pistoletazo de salida hacia un disco muy correcto.

Este “Nocturne” mezcla esos momentos evocadores que tan bien resultan con disparos mucho más certeros de base pop como la canción que da título al disco, es esa mezcla en la que encontramos el gran atractivo del disco. Tatum no renuncia a ser un soñador pero no a toda costa, “Only Heather” demuestra que los paraísos dream pueden tener canciones de pop puras como gran complemento, de nuevo en la misma línea que bandas como Real State o los últimamente recién ascendidos a los cielos DIIV.

Pero está claro que durante todo el disco, como si de una vigilia se tratara el sonido susurrante consigue adormecerte hasta la ensoñación, “Through the Grass” y sobretodo la gran joya de este disco “Paradise”.

De comienzos ochententeros, hasta hortera podíamos decir, pero resuelta a la perfección en un bucle de guitarras que acompañan a los teclados de manera sobresaliente para dar una ascensión al “paraíso” que remonta y de qué manera la sensación de estar escuchando casi la misma canción todo el disco. A partir de “Paradise” todo suena mucho más desenfadado, tal vez es en este momento cuando el disco mejor funcione, tropicalismo pop para “Counting Days” o la cierta influencia de The Cure en “The Blue Dress”.

Y como no podía ser de otra manera, de nuevo vuelta al redil de tu sueño con “Rheya” que podría estar firmada por los mismísimos Deerhunter, aunque esta vez los teclados rujen mucho más de lo habitual y el coro hace de presentación en unas estrofas de gran pesaje literario.

Nocturne” es, posiblemente el disco de mejor factura de Wild Nothing, un trabajo con una línea argumental técnicamente perfecta, y un producto excelentemente acabado, pero al disco le falta algo, gusta pero no entusiasma, “Paradise” no es suficiente,  para no tener la sensación de estar escuchando versiones de la misma canción una y otra vez.

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Escucha el disco en Spotify: Wild Nothing – Nocturne

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