Iron & Wine
Kiss each other clean
[Warner; 2011]
7.0
El cuarto disco de Sam Beam, más conocido por todos como Iron & Wine, tenía como fecha de salida el 25 de enero, pero desde hace ya unas semanas se puede escuchar en internet. Cuatro trabajos para darnos cuenta que la personalidad de los grandes artistas está muy por encima de los clichés establecidos y de las etiquetas generadas por cualquier creador. Valga como ejemplo el gran Sufjan Stevens pasado a la producción mucho más electrónica sin dejar un lado su esencia, ni su personalidad. Si escuchan los anteriores discos de Iron & Wine antes que este “Kiss Each Other Clean” encontrarán un estilo similar pero con matices, el bueno de Sam Beam no ha dejado de hacer folk, ni mucho menos, pero lo ha combinado con nuevos ritmos, el resultado ha sido por lo menos sorprendente.
Los cambios son básicos para seguir creciendo (habrá pensando), entre los cambios destacamos la inclusión de más instrumentación y un trabajo más minucioso en la producción dejando un producto variopinto, tal vez este cambio haya tenido mucho que ver su fichaje por Warner, para la producción de este disco ha contado con Brian Deck, que ya produjera “The Shepherd's Dog” y “Our Endless Numbered Days”, así que todos los que achaquen estos cambios al productor, téngalo en cuenta.
Como ejemplo claro de lo que hablamos su pieza “Me and Lazarus”, una composición con una esencia más reggae y que al tratarse de una de las primeras del disco coloca en estado de sobre aviso al oyente, aunque la firma de esta natural evolución se observa mucho mejor en “Monkeys Uptown” una canción con matices a golpes de lo que parece un xilófono, y efectos de maquinitas que resultan tan efectivas. EL primer single del disco ha sido para “Walking far for home” (presentado ya hace unas semanas) una canción de título muy americano y con una composición vocal que será recurrente a lo largo del disco.
A pesar de estos nuevos matices, sigue habiendo tiempo para composiciones más clásicas como “Half moon” pero el que espere banjo a toda pastilla que cambie de disco porque no es así, “Rabbit will Run” es el corte de más elaboración y más claro estandarte de la nueva aventura del tejano, una canción sencilla a la vez que compleja por los incesantes cambios que se van produciendo, desde ritmos africanos hasta voces enlatadas. Sam también ha tenido tiempo para probar con sonidos más jazzeros como en “Big Burned Hand” pasando sin pena gloria en la parte menos favorecida del disco.
Diez temas cerrados con siete minutos más cerca del pop-rock que de otro estilo, “Your fake name is good enough for me” es un cierre de categoría, para un disco muy revolucionario, no por lo que aporta sino por quién es el que lo hace, desde un folk puro como punto partida a la carrera de Iron & Wine, hasta un final como este disco, mucho más complejo sin llegar a ser redundante ni pretencioso, paso adelante de las inquietudes de un compositor diferente a la media, el “único” pero , el no haber sido mucho más valiente, como lo fue su compatriota Sufjan Stevens en su reciente “The age of Adz”. Un disco que mezclado con sus antiguos cásicos prometerá ser un excelente complemento para sus directos, y que seguramente con cada escucha mejore nuestra escéptica opinión. La pregunta ahora es ¿Cuándo veremos a Iron & Wine en directo?
Track list:
1. "Walking far from Home"
2. "Me and Lazarus"
3. "Tree by the River"
4. "Monkeys Uptown"
5. "Half Moon"
6. "Rabbit Will Run"
7. "Godless Brother in Love"
8. "Big Burned Hand"
9. "Glad Man Singing"
10. "Your Fake Name Is Good Enough for Me"
