Título original: Mechanic: Resurrection
Año: 2016
Duración: 99 min.
País: Estados Unidos
Director: Dennis Gansel
Guión: Philip Shelby, Tony Mosher (Personajes: Lewis John Carlino)
Música: Mark Isham
Fotografía: Daniel Gottschalk
Reparto: Jason Statham, Jessica Alba, Tommy Lee Jones, Michelle Yeoh, Natalie Burn, Yayaying Rhatha Phongam, Sam Hazeldine, Raicho Vasilev, John Cenatiempo, Aaron Brumfield, Tomer Oz, Eoin O'Brien, Geoffrey Giuliano, Anteo Quintavalle
Productora: Chartoff-Winkler Productions / Davis-Films / Millennium Films
Nota: 0
Tremebundo dislate, esta MECHANIC: RESURRECTION no merecería la pena el esfuerzo de hablar sobre ella de no ser por el asombro que uno siente al constatar que a sus mandos se sitúa el germano Dennis Gansel, autor, entre otras de la exitosa y sobrevalorada LA OLA. De todos es sabida la costumbre que tiene la industria norteamericana de, para aumentar sus huestes industriales, tentar a jóvenes directores que han despuntado en otra cinematografía alejada. La historia del cine hollywoodiense, prácticamente desde sus inicios, está colmada de esa suculenta corriente migratoria profesional. Por desgracia, no todos los fichajes han contribuido a engrandecerla, pues muchos de los llamados apenas han podido hacer nada por rebelarse frente a los imperativos de los mandamases que se habían fijado en ellos. La nómina de sucumbidos a ese sometimiento es muy larga. Tras ver MECHANIC: RESURRECTION, Gansel debe a pasar al grupo de los Vip de ese decepcionante grupo de impersonales aplicados al mandato contratante. Entendámonos, esto es como si Ferrán Adriá se deja El Bulli para ir a hacer aros de cebolla a un Burguer King de Minnesota.
La película narra la vuelta al ruedo mamporrero de Arthur Bishop, el rey de las galletas no Fontaneda. Todo el mundo le da por muerto, pero él se las promete muy felices en Río de Janeiro, ganándose la vida paseando turistas en su barquito. De súbito, un antiguo compinche suyo que lo odio da con él y trata de convencerlo para que haga para él tres trabajitos, que consisten en que se cargue a tres tíos haciendo que la morgue parezca un accidente. Arthur se niega, se cabrea y se infla a hostias. Sin embargo, la aparición de una bella mujer, de la cual cae perdidamente enamorado, cambiará el designio de las cosas.
MECHANIC: RESURRECTION es un mierdón. Digámoslo pronto y con la nariz tapada con cemento. Todo en ella es una afrenta. Desde el punto de vista del guión, sólo cabe decir de él que es un supino cúmulo de despropósitos desde el minuto uno: la irrupción del personaje femenino interpretado por Jessica Alba, el desarrollo interno de las tres misiones que le son encargadas, la catadura del villano de la función, el asalto final al yate de éste, y todas y cada una de las ideas (o patadas creativas) que se tratan de dirimir no llegan ni a la condición de apunte. Lo mismo cabe decir de las dotes de Gansel como realizador de pelis de acción con chuletas no de cordero. Es tan creíble como Falete haciendo hamburguesas de espelta, tan hábil como Paquirrín al frente de la Filarmónica de Londres. El film (o conjunto de secuencias hilvanado con criterio soplamocos) deviene un insufrible compendio de necedades, disparates y chusquerías, puesto que no hay una sola aportación escénica que lo exima de su tonelaje de vulgaridad. Jason Statham vuelve a hacer de tornillo de cabeza cilíndrica ranurada y la Alba pierde la oportunidad de demostrar que es mejor actriz que su bikini. Todo, en definitiva, para gusto de quien guste confundir cine con ferretería a punto de traspasar.