“La siguiente reseña sucede entre las 11 y las 12 del mediodía” "Los hechos ocurren en Tiempo Real"
Así empezaba 24, una serie que es, a todas luces una de las más innovadoras en el género televisivo. Tras ese mensaje, el tiempo quedaba detenido durante una hora donde quedabas absorto frente al televisor. 24 ha llegado al final en España, el pasado mes de junio, coincidiendo con el lanzamiento en DVD de la temporada final.
24 es una serie creada por Imagine Television y emitida por Fox, y está formada por ocho temporadas y una película que unía dos de las temporadas finales. La serie narra las peripecias de Jack Bauer (Kiefer Sutherland), en la CTU (Counter Terrorist Unit) o UAT, "Unidad antiterrorista" de la ciudad de Los Ángeles. Hasta aquí todo normal, entonces ¿qué hace tan especial esta serie?.
Cada temporada consta de 24 capítulos que ocupan una hora a tiempo real, por lo que vivimos un día completo en la vida de los personajes. Un recurso que puede parecer aburrido, pero nada más lejos de la realidad. La serie viaja a una velocidad trepidante, con tres tramas por temporada, acción, familia y política. La serie queda definida con la posibilidad primaria de un ataque a gran escala que hay que detener, a partir de aquí, sopresas, traiciones y derivaciones que complcan de manera notable el argumento. Hasta que todas las historias se entrelazan de manera limpia y sin "trompicones".
Y es aquí donde se aplica el “todo vale”, con una carga de violencia inusual, y con un personaje, Jack bauer, que consigue dominar la desesperación de saber que está cavando su propia tumba se presenta cada temporada de 24. Aunque a lo largo de las temporadas, descubrimos un Bauer mucho más humano y atormentado, en lo que dota a la serie de un goce mayor. La culpabilidad, el dilema del “fin justifica los medios” son solo algunos de los temas tratados, en esta serie extensa, y que responde a las mil maravillas a la palabra, entretenimiento.
Cuando echo la vista atrás recuerdo muchas imágenes, pero lo que siempre recordaré son las noches en las que me acosté agustiado porque la incertidumbre se cernía sobre alguno de mis personajes favoritos. 24 no tiene piedad con los personajes que crees que tomarán un papel relvante, si deben desaparecer lo harán, cuándo, solo lo sabrás si la ves.
Ataques biológicos, amenzas a los Presidentes americanos, alertas nucleares, desde Oriente y Occidente y una crítica voraz a la política americana. Maltratada en España por cadenas como Antena 3, empeñadas en que basuras como “El barco”, “Física o química” o cualquier cuchicheo sobre cualquier famoso que no haga la “o” con un canuto, sean el programa más seguido en su “Prime Time”. Esta política que premia a la basura mas pestilente del país, han hecho que obras como 24 y otras tantas series que debimos disfrutar en su momento lleguen tarde y mal, menos mal que existe internet. La pena de todo esto es que el público le de la razón a esta política televisiva del bochorno.
La serie, por si fuera poco, además cuenta con careos tan importantes y decisivos en la trama como el de Jon Voight o el de Tony Todd. Robert Cochran y Joel Surnow son los creadores de la serie, y demuestran tras 192 episodios que las series no están reñidas con la calidad cinematográfica. La última de las temporadas además cuenta con la sorpresa del cambio de ciudad, ya que las siete primeras transcurren en Los Ángeles. Magnífica, bárbara, violenta, trepidante, angustiosa, son algunos de los atributos que se me ocurren al definirla. Que no te coman la cabeza, nos han vendido que esto no nos gusta y es falso, nos encanta, como díría el propio Bauer:
Las normas nos hacen mejores
Hoy no.
Larry Moss & Jack Bauer (7ª Temporada)