The Birkins contestan las preguntas del equipo de la Z
Frotando la lámpara del Genio Equivocado hemos tenido la posibilidad de hablar con el grupo The Birkins que acaban de sacar su segundo disco “Châteaux En Espagne”. UNa banda que se encuentra en promoción de su nuevo material y que nos han dedicado un rato en su apretada agenda, aquí el resultado.
Recién sacado su disco “Châteaux En Espagne” lo primero que hemos notado es que sin perder las influencias más delicadas de vuestro debut este disco se nota más visceral puede que más agresivo, ¿a qué se debe? ¿Habéis dejado de escuchar Wilco o Tindersticks para dar paso a Nick Cave o a Dominique A?
(risas) Bueno, por suerte nuestra dieta musical no se ha privado de ninguno de los cuatro artistazos que mencionas. Nos han pasado muchas cosas en los dos años transcurridos entre la grabación del debut y la de este nuevo disco: por un lado, estamos aprendiendo a movernos en el estudio, con lo que nos resulta más sencillo trasladar a una grabación la idea que podemos tener en la cabeza. Eso nos ayuda a conseguir ser más delicados o más rudos según lo que nos pida cada canción. También hay que tener en cuenta que el grupo ha ido consolidando su directo en el último año, lo cual se traduce en un chute extra de energía y confianza cada vez que nos juntamos a tocar. El último motivo es estrictamente anímico; así como en nuestro debut nos rodeaba la felicidad y la ilusión, en el proceso de creación “Châteaux…” hemos tenido que lidiar con muchas circunstancias agridulces, algunas de ellas reflejos de los tiempos de incertidumbre en los que estamos todos sumidos. Resulta imposible no responder ante eso sacando algún que otro colmillo eléctrico.
A pesar de que hay más puntos en los extremos de este disco, el resultado es un disco completamente homogéneo y cuidado ¿cuánto os habéis involucrado en la producción del disco?
Mucho. Nos preocupa que las canciones estén bien acabadas y que cada cual ofrezca los suficientes alicientes sonoros como para justificar el tiempo y la atención que pedimos al oyente. Desde el local ya llevábamos pensados los grandes trazos sonoros que queríamos reflejar, así como las estructuras y gran parte de los arreglos. Eso sí, trabajábamos con la tranquilidad de quien sabe que, si se le va mucho la olla, tiene a Paco Loco para ejercer de “policía musical” y poner las cosas en orden.
Segundo asalto con Paco Loco, viendo el resultado del primer disco lo entendemos perfectamente, pero puede que esté trabajo haya quedado mucho más pulido, ¿qué cosas han cambiado con respecto al primero?
Honestamente, creemos que somos ahora mucho mejor banda, nos conocemos mejor entre nosotros y sabemos los puntos fuertes (y los flojos también) de cada uno de nosotros. Esto se traslada a nuestra relación con Paco, a quien ya no teníamos que explicar lo que queremos hacer. En cierta manera, él forjó con nosotros el sonido del grupo en el debut. Luego hemos tenido dos años para coger esa idea y darle forma por nuestra cuenta hasta finalmente completar el círculo volviendo al Puerto de Santa María con los deberes bien hechos.
Una pregunta que seguro os han hecho muchas veces, ¿os ponen pegas por cantar en francés? ¿No es una pequeña desventaja para poder cerrar fechas en España? (aunque tengáis letras en inglés) ¿habéis pensado sacar algo en castellano?
¡Al contrario! Tener un idioma diferente nos ha abierto más puertas de las que creíamos y agradecemos enormemente que se nos haya tenido en cuenta en gran parte de los festivales nacionales. Para nosotros el idioma es un juego: da sonoridades que buscamos en las canciones y nos llevan a lugares que varían según el idioma en el que estemos trabajando. Y en cuanto al castellano nunca nos hemos cerrado en banda, de hecho podría haber sorpresas en un futuro no muy lejano…
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Empezar una nueva gira con nuevo disco debajo del brazo tiene que ser una experiencia muy gratificante, ¿cómo suena este nuevo trabajo en directo? ¿Qué podemos esperar?
Cierto, hemos sido unos verdaderos privilegiados pues coincidieron esos conciertos de gira con la llegada de ese segundo disco. Nos sirvió para testar poco a poco la traslación al directo de algunas de las canciones más elaboradas del nuevo disco. El lado más agresivo y “rockero” de este trabajo ha encontrado su sitio en los conciertos de una manera muy natural, mientras que los temas que en el disco resultaban más atmosféricos o delicados ya están poco a poco encontrando una personalidad adecuada para defenderse encima de los escenarios. Sin duda, estas canciones han enriquecido mucho la experiencia de los directos, y nos están sirviendo para dejar atrás aquellas piezas del viejo repertorio con las que uno ya no termina de identificarse y que a veces se acaban tocando porque falta material vigente que sostenga un concierto entero. ¡Estamos llegando a algo parecido a una meta!
Justo ahora, cuando más posibilidades hay para los músicos de promoción con internet y demás, es cuando parece que la vida de un músico está más en peligro de extinción. ¿quién tiene la culpa de esto?
No sabemos cómo distribuir culpas, pero lo cierto es que se ha conformado una tormenta perfecta en la que que entra la crisis económica del país, la crisis que ya arrastraba la industria discográfica y, lo más preocupante, una crisis de valores en la que no se le da importancia a la música más allá de un divertimento pasajero, y en la que por supuesto cuesta plantearse soltar un duro por escuchar música en cualquiera de sus formatos. Esa es una de las lecturas que queremos darle al título de nuestro disco Châteaux en Espagne (Castillos en el aire).
La portada de “The Birkins” nos mostraba un jarrón colorido dando paso un disco de pop melódico y con arreglos muy preciosistas, en “Châteaux En Espagne” salís con una portada mucho más conceptual en blanco y negro, ¿qué significa esto? ¿Quién os hace el Art Work?
Con el corazón en la mano, no creemos que la música de nuestros dos discos sea tan, tan diferente entre sí como lo son las portadas y el art work de cada uno de ellos. Ambos casos son consecuencia de tratar con artistas a los que respetamos y admiramos y pedirles que reflejasen en una portada aquello que les transmitiese el disco. La diferencia con Châteaux es que hemos trabajado con Noemí Tejera, quien nos conoce profundamente desde nuestros comienzos, y a quien ya confiamos todas nuestras fotos promocionales. Con Noemí tuvimos ocasión de hablar largo y tendido sobre el estado mental y musical en el que nos encontramos, y ella nos sorprendió con un art work que nos situaba en un plano totalmente nuevo a nivel estético mucho más conceptual; contemporáneo pero sin negar el valor de la nostalgia y de la identidad territorial (el paisaje que se adivina en la portada es un juego de escalas extraído de una localización del norte de Gran Canaria).
¿Si organizarais un festival quién sería vuestro cabeza de cartel?
¿Cuál es el presupuesto? (risas) Si no hay mucho dinerillo, nos montamos una Fiesta de El Genio Equivocado y seguro que nos queda la mar de resultona. Si se puede contar con quien se quiera, yo me traería a alguno de los peces gordos que más nos guste (hay mucho para elegir) y, como organizamos nosotros, nos pondría por la cara un puesto de honor en el escenario principal, y no daría los horarios de actuación, para que la gente tenga que vernos por miedo a perderse su grupo favorito.
El Genio Equivocado es un sello que supongo trabajáis como una familia, ¿con qué grupos del sello os lleváis mejor? ¿y peor?
¡En esta familia solo tenemos halagos para los hermanos! Mantenemos muy buena relación con los componentes de los otros grupos, y muchos nos han salvado el pellejo prestándonos sus instrumentos en alguna de nuestras incursiones peninsulares. Con Wiggum existe una afinidad especial que hemos ido trabajando a base de compartir escenario y camerino en varias ocasiones, y hemos tenido ocasión de traducir ese buen rollo en colaboraciones, ya sea en el escenario o en el estudio de grabación (Cris hace coros en el nuevo, e indispensable, disco de Wiggum, La guerra mundial). Estamos deseando volver a saltar el charco para alguna fiesta del Genio Equivocado que ya empiezan a ser imprescindibles en la escena independiente.
¿Cuáles son las previsiones para este 2013?
La idea es seguir promocionando el disco por todo el territorio: festivales, salas de conciertos, acústicos, etc… incluso hay algún que otro intento por meter la patita fuera de España, pero por ahora es eso, solo un ‘intento’.
Un placer hablar con The Birkins.