Sección: OFICIAL
Dirección: Piero Messina
Nota: 1
Líneas valorativas:
Empezamos a estar más hartos de las distopías que María del Monte de su sobrino. Desde luego con esta bobería feucha llamada ANOTHER END dan ganas de meterse en universos distópicos lo mismo que de comprar aceite de oliva Hacendado a 10 eurelios el litro. Eso sí ambas se parecen en lo mismo: con las dos se queda uno mal frito. Boquerón rebozado con resultado de boquerón a la chamusquina. La cosa esta se promete a sí misma como una diatriba sobre esa inatajable consternación que es el luto.
Se nos presenta una lóbrega sociedad futura en la que una empresa ofrece la posibilidad a todo aquel que ha sufrido una pérdida irreparable de, mediante el cuerpo de unos voluntarios vivos neuronalmente adiestrados, despedirse del recién finado, dando una segunda oportunidad gracias a la cual aliviar, encajar la pérdida haciendo de esta una despedida asimilada. El film escoge a un tipo que ha perdido a su joven esposa en un accidente de coche. El problema principal de esta producción de Piero Messina es que, de entre todas las posibilidades intuidas a un planteamiento en modo alguno desdeñable, la deriva argumental privilegia la más nefanda: la del melodrama afectivo.
El desafuero amoroso incinera la más mínima fuga hacia un relato de corte turbio, misterioso, indagador en los parámetros más ensayísticos o existenciales del género. La película (o pésame) es fría como la mano de un muerto sin segunda oportunidad; un cadáver romanticoide ridículo, pelma y con una monotonía escenográfica de tanatorio de polígono. Gael García Bernal hace muy bien de vela que nadie ha pedido en el entierro. Esto es Asimov adaptado por Sonsoles Ónega. Un premio Planeta Cenizas.